Los atentados terroristas son sucesos excepcionales, pero con impacto devastador. En España, la cobertura por daños derivados de terrorismo, motines o actuaciones de las Fuerzas Armadas está garantizada, en parte, por el Consorcio de Compensación de Seguros. Sin embargo, no todo está cubierto por defecto, y hay casos en los que una póliza específica puede marcar la diferencia.
¿Qué cubre el Consorcio de Compensación de Seguros?
Cuando se produce un acto terrorista reconocido como tal por el Ministerio del Interior, el Consorcio cubre:
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Daños materiales a inmuebles, vehículos o instalaciones aseguradas en una póliza de riesgos ordinarios (hogar, comercio, industria, etc.).
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Pérdida de beneficios si está expresamente contratada en la póliza.
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Daños personales (fallecimiento, invalidez...) derivados del acto.
Para que el Consorcio actúe, la póliza del bien afectado debe estar en vigor y al corriente de pago e incluir el recargo obligatorio que todas las aseguradoras trasladan.
¿Qué no cubre el Consorcio?
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Equipos móviles no registrados (por ejemplo, maquinaria sin matrícula).
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Daños en bienes no asegurados previamente.
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Pérdidas indirectas no contempladas expresamente (clientes perdidos, impacto reputacional...).
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Ciberterrorismo o sabotaje digital, salvo en pólizas especializadas.
¿Qué sectores deberían ampliar su cobertura?
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Infraestructuras estratégicas (energía, agua, transportes).
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Sedes institucionales o diplomáticas.
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Empresas con presencia en entornos sensibles o zonas fronterizas.
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Grandes eventos o espectáculos públicos.
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Entidades vinculadas a la seguridad o defensa.
Existen seguros específicos de terrorismo y sabotaje, que complementan o amplían lo ofrecido por el Consorcio, incluyendo:
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Coberturas fuera del territorio español.
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Gastos de evacuación o rescate.
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Continuidad de negocio ante ataques indirectos.
En Seguroscer...
...te ayudamos a analizar tu nivel de exposición, verificar que tus pólizas están correctamente configuradas para acceder a las indemnizaciones del Consorcio y, si es necesario, completar tu protección con coberturas especializadas. La seguridad total empieza por una revisión profesional.