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El pasado día 11 de septiembre podíamos leer 'La DGSFP (Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones) informa a representantes de la Mediación sobre próximos cambios normativos'.

Nos complace tanto esa noticia  como que nos apresuramos a decir que bendita sea la hora en que se toman cartas en el asunto, de forma aparentemente seria, para corregir los excesos regulatorios en materia de análisis objetivo y la labor delos auxiliares de corredurías.

Ya para comenzar, el mismo nombre de AUXILIAR ya es despectivo. ¿Como no va a dejarse al criterio de cada empresa para designar a sus colabradores con el nombre que le parezcca más idoneo? Imaginemos que legislación diga que los vendedores de coches deberán llamarse “expertos en movilidad a motor” o “ingenieros estrategas comerciales de venta” ¿a que suena a ridículo? Pues en nuestro caso nos obligan a llamar auxiliares a personas, no que ya tienen posiblemente titulaciones superiores universitarias, sino que les encasillamos en nombres despectivos de AUXILIARES; solo falta decir que subalternos.

Y encima nos obligan a llamarles EXTERNOS; acaso un contratado con un contrato mercantil no pertenece a la empresa como otro que esté en nómina y, por tanto, INTERNO?

Cualquier empleado de una correduría, sea INTERNO, con contrato laboral, o EXTERNO, con contrato mercantil, tiene la responsabilidad asumida por la propia empresa como es habitual en el mundo del comercio y como establece el código civil en cuanto a la responsabilidad.

Además ¿Cuando se tomarán medidas para diferenciar la actividad de los agentes de seguros de los mediadores CORREDORES Y CORREDURÍAS? Es acaso lo mismo un señor que vende un seguro de una sola empresa, la suya, que otro que vende los seguros de todas las compañías del mercado y, por tanto, esta obligado a conocerlos para prestar un mejor servicio con relación a su competencia? NO SOMOS LO MISMO. DE UNA VEZ POR TODAS.

Y, por ultimo, y por lo que respecta a los productos, ¿no es acaso precisamente un análisis de los productos de la competencia el que diferencia un buen trabajo de una correduría con otra? Acaso es el gobierno quien tiene que bendecir a unos agentes o condenar a unas corredurías con la obligaciónde analizar expresamente con un análisis llamado objetivo. Eso parece que es rizar el rizo y darse trabajo los funcionarios para que llenen su tiempo y justifiquen su retribución con cargo a los presupuestos del estado, es decir, nuestro dinero?